El juicio al que se enfrentan en Grecia los tres bomberos sevillanos de la ONG Proem-Aid está en curso y de momento dos de los tres acusados, Manuel Blanco y Julio Latorre, han declarado su inocencia frente a la acusación de tentativa de trafico de personas.

Este supuesto delito se remonta a enero de 2016, cuando se encontraban en la isla de Lesbos, realizando tareas de rescate humanitario.

En el juicio han testificado varios guardias costeros con los que estuvieron en contacto durante su estancia en la isla. La tónica durante todo el proceso, a pesar de la dureza del interrogatorio de la fiscal, ha sido que Manuel Blanco, Julio Latorre y José Enrique Rodríguez siempre actuaron cumpliendo las normas y avisando previamente de sus salidas al mar a las autoridades.

Blanco, el primero en testificar, ha explicado que la primera vez que fueron a Lesbos llegaron en comisión de servicio, que como profesionales y funcionarios saben que siempre hay que contactar con los guardacostas antes de realizar una salida, y que así lo han hecho siempre. También ha insistido en que sólo vinieron a salvar vidas. Esa idea ha sido reiterada por Latorre, que ha explicado que invirtió unas vacaciones de su trabajo como bombero en Sevilla para venir a esa misión.

La consejera de Justicia e Interior de la Junta de Andalucía, Rosa Aguilar, también ha declarado. Aguilar ha reiterado la profesionalidad de los tres funcionarios y ha destacado las miles de vidas que se han salvado gracias a Proem-Aid.

Junto a ellos han comparecido, con una línea de defensa separada, Mo Abassi y Salam Aldeem, los dos daneses de Team Humanity que tripulaban la embarcación cuando fueron detenidos. Este último, dueño del barco, ha sido interrogado por la fiscal sobre si comunicó o no a las autoridades, como es obligatorio, la presencia de un bote a la deriva y su salida en su busca.

Tanto Blanco como Latorre han explicado que salieron al mar acompañando a la organización danesa porque sus miembros se lo pidieron ante el aviso de una embarcación con inmigrantes a la deriva. Aquella noche del 14 de enero de 2016, la barca de Proem-Aid estaba siendo reparada.

Latorre ha señalado que estuvieron buscando dicha embarcación durante 40 minutos y que, al no encontrar nada, regresaron a la costa de Lesbos, momento en el que fueron arrestados.